sábado, 30 de abril de 2011

-Me da miedo decir algo equivocado... te amo.
-Vuelvelo a decir. 
-Te amo. 
-Nunca dejes de decirlo. 
-Te amo, te amo, te amo. 
-Nunca habia sido tan feliz en toda mi vida. 
-Yo tampoco.
-¿Tan feliz como para tocar el cielo con un dedo?
-No, mucho más. Al menos tres metros sobre el cielo.